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El MCC en Brasil. Una mixtura de colores.

En el año 1962, el Movimiento de Cursillos de Cristiandad encontró en Brasil una tierra especialmente fértil para su expansión. En un contexto histórico en el que amplios sectores del mundo vivían alejados de Dios, el MCC se afirmó como un método eficaz para conducir a las personas a una auténtica conversión espiritual, mediante un método propio, de carácter kerigmático y testimonial.

Dicho método favorece un triple encuentro: consigo mismo, con Cristo y con la comunidad, generando vínculos de amistad cristiana que impulsan a las personas a llevar a otros a la amistad con Cristo, orientando sus vidas hacia el Reino de Dios y la eternidad.

EXPANSIÓN DEL MCC FUERA DE ESPAÑA

Antes de su llegada a Brasil, el Movimiento de Cursillos de Cristiandad se implantó en Colombia, en América del Sur, a través de la Acción Católica. En dicho país se celebró no solo el primer Cursillo fuera de España, sino también el primer Cursillo para Mujeres, en el año 1953, marcando un hito fundamental en la expansión internacional del Movimiento.

  1. Primer Cursillo para Mujeres – Colombia – Febrero 1953.

 

VALINHOS, DONDE TODO EMPEZÓ

Hay historias que comienzan en un susurro, casi sin que nadie lo note, y que con el tiempo se convierten en un canto grande y lleno de colores. Así empezó la historia del Movimiento de Cursillos de Cristiandad en Brasil, en un año que no parecía destinado a grandes titulares pero que, sin embargo, marcó un antes y un después en la vida espiritual del país: celebrado durante la Semana Santa, del 18 (miércoles) al 21 (sábado) del año de abril de 1962. Esto sucedió en una casona de la Hacienda São Joaquim (Valinhos, SP).

  1. Escalera de la Casa São Joaquim, donde tuvo lugar el 1er Cursillo, para hombres en Brasil.

En la tranquila ciudad de Valinhos, un pequeño grupo de hombres se reunió para vivir lo que sería el primer cursillo brasileño. Nadie sabía aún qué sería de aquello, ni cuánto podría crecer, ni cuántas vidas tocaría. Solo se sabía que algo especial estaba a punto de nacer. Y así fue. Durante esos días, entre conversaciones sinceras, momentos de silencio, oraciones compartidas y descubrimientos personales inesperados, comenzó a gestarse una obra que, con el paso de los años, se extendería por todo Brasil como un río que se abre paso hasta convertirse en mar.

Desde ese primer encuentro, algo quedó claro: la espiritualidad del MCC tenía un modo natural de resonar con el corazón brasileño. El país vivía un período vibrante de iniciativas pastorales, renovación litúrgica, nuevas formas de participación laical y búsquedas profundas dentro de la Iglesia.

Conviene mencionar que el mundo católico se encontraba en vísperas de la apertura del Concilio Vaticano II, convocado por el Papa Juan XXIII, el 11 de octubre de 1962.

Brasil estaba en movimiento, sediento de caminos apostólicos que unieran la experiencia personal con la vivencia comunitaria. Fue precisamente en ese terreno fértil donde el MCC encontró no solo aceptación, sino un hogar. Por eso, el Movimiento no tardó en expandirse. Las comunidades comenzaron a escuchar lo que había ocurrido en Valinhos, se contagiaron de la emoción, y pronto empezaron a pedir cursillos en otras ciudades. Lo que había empezado como un pequeño gesto local se transformó casi sin darse cuenta en un proceso de crecimiento que nadie podía detener. Después del cursillo en Valinhos, el segundo Cursillo tuvo lugar en Mogi das Cruzes, también en el estado de São Paulo, y posteriormente se fue extendiendo por todo Brasil.

PRIMEROS ASESORES ECLESIÁSTICOS DEL MCC – BRASIL

En medio de ese crecimiento apareció una figura que se convertiría en uno de los grandes protagonistas de esta historia del MCC Brasil: el Padre Paulo Cañelles. Su presencia marcó una época. Quienes lo conocieron lo recuerdan como un sacerdote incansable, lleno de empuje apostólico, con una capacidad extraordinaria para entusiasmar, acompañar y encender corazones. No fue solo un organizador ni un gestor; fue un apóstol auténtico, alguien que creía profundamente que el Evangelio podía transformar la vida de cada persona, y que veía en los Cursillos un camino real para hacerlo. Gracias a su entrega, a sus viajes constantes, a sus encuentros con la gente sencilla y con los líderes eclesiales, el MCC en Brasil recibió un impulso decisivo. Bajo su guía, el Movimiento no solo creció en número, sino también en espíritu, en identidad y en claridad de misión.

Tras un accidente automovilístico fatal del Padre Paulo Cañelles (1973), otro sacerdote muy dedicado al MCC, el Padre José Gilberto Beraldo, continuó la misión del Cursillo en Brasil.

  1. P. Paulo Cañelles y P. José Gilberto Beraldo

  1. Primeros assessores eclesiásticos del MCC en Brasil

RECONOCIMIENTO CANÓNICO AD EXPERIMENTUM DEL ESTATUTO DEL OMCC (2004)

En el año 2022, Brasil asumió la coordinación mundial del OMCC, integrando este Comité: P. José Gilberto Beraldo (asesor mundial), Francisco Alberto Coutinho (presidente), Antônio Carlos Salomão – Tony (vicepresidente) y Maria Elisa Zanellato (secretaria).

En esta gestión, el P. José Gilberto Beraldo desarrolló un trabajo relevante al servicio de la aprobación (ad experimentum) del Estatuto del OMCC por el entonces Consejo Pontificio para los Laicos (PCL: Pontificium Consilium Pro Laicis), hoy Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida.

  1. Roma – 2004.
  2. Sitio web del Vaticano con el registro de la aceptación del Estatuto del OMCC, presentado por Brasil en el año 2004.

El Padre Beraldo viajó por todo el mundo al servicio del OMCC, estableciendo contacto con todos los líderes cursillistas y con las autoridades eclesiales del Movimiento de Cursillos de Cristiandad.

  1. Monseñor José Ángel Saiz Meneses y P. José Gilberto Beraldo

NUEVA PARTICIPACIÓN DE BRASIL EN EL OMCC

Brasil vuelve a integrar la estructura de servicio mundial del Movimiento de Cursillos de Cristiandad, tras la elección del Organismo Mundial de Cursillos de Cristiandad (OMCC), realizada en Monterrey, México, en el año 2023.

En dicha elección mundial del MCC, Brasil pasó a contribuir nuevamente al servicio del OMCC con la elección del médico Adair J. Batista como Vicepresidente Mundial, junto al médico veterinario Álvaro M. Moreno, actual Presidente Mundial, fortaleciendo así la comunión y la colaboración entre los países y consolidando la conexión histórica entre España y Brasil.

  1. Adair – Elecciones OMCC, Monterrey, México 2023

  1. Conexión OMCC 2023-2027: España (Álvaro) y Brasil (Adair).

EL PAÍS CATÓLICO MÁS GRANDE DEL MUNDO

Brasil es un país de dimensiones continentales y también el país con el mayor número de católicos del mundo. Actualmente, la Iglesia Católica en Brasil cuenta con 488 obispos vivos, de los cuales 316 están en ejercicio pastoral y 172 son obispos eméritos, quienes continúan colaborando con la misión evangelizadora de la Iglesia.

  1. Según el Anuario Pontificio del Vaticano, Brasil, tiene el mayor número de católicos del mundo, seguido de México.

CANTIDAD DE CURSILLOS REALIZADOS POR AÑO EN BRASIL

De acuerdo con estimaciones basadas en la realidad en Brasil, se realizan aproximadamente cuatro (4) Cursillos por diócesis al año, con una participación media de 40 personas por Cursillo, considerando un universo aproximado de 150 diócesis.

En este contexto, se estima que en Brasil se realizan alrededor de 600 Cursillos anualmente, lo que representa un total aproximado de 24.000 nuevos cursillistas por año.

  1. Estimación anual de cursillos en Brasil

Detrás de ese número inmenso se esconde una multitud de historias humana: matrimonios fortalecidos, jóvenes que descubrieron su vocación, trabajadores que llevaron el Evangelio a sus lugares de labor, sacerdotes que renovaron su entusiasmo pastoral, comunidades enteras que recuperaron la esperanza. La expansión del MCC en Brasil es, en definitiva, la expansión de la gracia actuando en la vida cotidiana.

CURSILLO PARA JÓVENES

El Cursillo para Jóvenes forma parte integrante de la historia y de la vida del Movimiento de Cursillos de Cristiandad en Brasil, en continuidad con su carisma, su método y su finalidad.

En el año 1985, en la Arquidiócesis de Olinda y Recife, el entonces Arzobispo, Dom Hélder Câmara, autorizó, ad experimentum, la realización del primer Cursillo de Cristiandad para Jóvenes en Brasil. Esta autorización pastoral respondió al discernimiento de la Iglesia ante los desafíos de la evangelización de la juventud y se concedió en plena comunión eclesial y en fidelidad al carisma original del MCC.

Dicha experiencia no dio origen a un movimiento distinto o autónomo, sino que constituyó una aplicación pastoral del mismo Movimiento de Cursillos de Cristiandad, realizada con la participación y el acompañamiento de dirigentes adultos, conforme a la estructura, a la metodología y a la identidad propias del MCC.

La autorización ad experimentum de cursillos para jóvenes no significó una ruptura, sino una adaptación legítima del lenguaje y de la dinámica al universo juvenil, respetando íntegramente el carisma, el método, la finalidad y la identidad del Movimiento.

A partir de esta experiencia inicial en Olinda–Recife, el Cursillo para Jóvenes se fue difundiendo progresivamente en otras diócesis de Brasil, siempre bajo la orientación de los Secretariados correspondientes y el acompañamiento de los obispos locales, en comunión con la Iglesia y en fidelidad al carisma del Movimiento de Cursillos de Cristiandad.

De este modo, el Cursillo para Jóvenes en Brasil se encuentra consolidado (existe desde 40 años) y actúa como un elemento de expansión del Movimiento de Cursillos de Cristiandad, con una presencia activa desde hace cuarenta años.

  1. Cursilho para jóvenes, Diócese de Uberlândia, MG – Brasil

Los Cursillos para Jóvenes siempre están supervisados por dirigentes adultos y sacerdotes (directores espirituales).

Es oportuno señalar que el Movimiento de Cursillos de Cristiandad en Brasil mantiene un compromiso permanente con la perennidad del Movimiento. Con este objetivo, a lo largo de los últimos cuarenta años, ha procurado desarrollar mecanismos que favorezcan su renovación y continuidad, facilitando la sucesión de dirigentes en todos los niveles, mediante una fidelidad creativa, conforme a lo expresado en el IF3 Ed., § 61. Dichas acciones se realizan, de manera inequívoca, en respeto al carisma original, mentalidad, método y la finalidad propia del Movimiento, conforme a lo establecido en el IF3 Ed., § 58.

Desde aquel primer cursillo en Valinhos (1962) hasta la actualidad, esta historia se ha ido escribiendo entre abrazos de Ultreya, grupos de amistad que se sostienen en la distancia, dirigentes que entregan su tiempo con generosidad y comunidades que siguen creyendo que el Evangelio puede cambiarlo todo. Y lo más hermoso es que la historia no ha terminado. Sigue abierta, en construcción, esperando a nuevos protagonistas.

¡De Colores y viva la vida!

 

Adair J. Batista (15-12-2025)

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